La tuberculosis mantiene sus cifras en España
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Según los últimos datos publicados por la Red de Vigilancia Epidemiológica de España, a mediados de julio de 2009 ya se habían notificado 3.340 nuevos casos de tuberculosis en España. Según datos provisionales publicados, este centro nacional registró en 2009, 6.070 casos de tuberculosis. Sin embargo, estas cifras deben considerarse con reservas, ya que a pesar de que la tuberculosis es una enfermedad de declaración obligatoria, se estima que al menos una tercera parte de los casos no se notifican. Según datos publicados por la OMS (Organización Mundial de la Salud), España alcanzó los 13.000 pacientes nuevos de tuberculosis en 2007, con un índice de incidencia de 30 nuevos casos por 100.000 habitantes, mientras que la Red de Vigilancia Epidemiológica daba una cifra de 6.546.
La tuberculosis se sitúa como la tercera enfermedad de declaración obligatoria en incidencia, según los últimos datos correspondientes a 2009 del Centro Nacional de Epidemiología; sólo superada por la gripe y la varicela. Por Comunidades Autónomas, Cataluña sigue a la cabeza de casos declarados alcanzando los 1.342, seguida de Andalucía con 838 y Madrid con 770 enfermos. El Dr. Juan Ruiz Manzano, presidente de SEPAR, asegura que “la lucha contra la tuberculosis, que es quizás una de las enfermedades más antiguas y todavía no superada, implica una lucha no sólo científica en la mejora de los tratamientos, el diagnóstico y la prevención sino también social”.
“No obstante”, comenta este neumólogo “el Plan de Prevención y Control de la Tuberculosis, auspiciado por el Ministerio de Sanidad y Política Social en colaboración con SEPAR contribuirá a coordinar esfuerzos e introducir mejoras en todo el circuito de atención a esta enfermedad, aunque seria preciso el desarrollo de un Plan Nacional lo cual implica que tendría una dotación presupuestaria para poder implementarlo de forma adecuada”. En España, además, se notificaron en 2008, 76 casos de tuberculosis multiresistente, según cifras publicadas por la OMS.
Las resistencias aparecen cuando no se sigue correctamente el tratamiento o cuando éste está mal indicado. En España, en los últimos años, se han detectado cepas resistentes importadas por viajeros, cooperantes e inmigrantes procedentes sobretodo de Europa del Este, Asia y países latinoamericanos. El término TB multi-resistente implica resistencias a los fármacos principales que se utilizan en el tratamiento y se habla de TB extremadamente resistente cuando además existe resistencia a los fármacos de segunda línea (especialmente fluoroquinolonas) y al menos a uno de los inyectables, y esto puede dar pie a casos –algunos en España- en que se agote cualquier posibilidad terapéutica.
En datos absolutos, por Comunidades Autónomas y según los datos del Centro Nacional de Epidemiología, en 2009, Cataluña encabeza la lista de casos detectados de tuberculosis (1.342), seguida de cerca por Andalucía (838), Madrid (770), Valencia (648) y Galicia (605). En cambio, en proporción al número de habitantes, Ceuta con 28 enfermos y un ratio de 40,39 casos por 100.000 habitantes y Melilla con 22 enfermos (32,67) se sitúan en primer y segundo lugar, y Galicia (22,31) y La Rioja (20,16) en tercer y cuarto, respectivamente. Cataluña, a pesar de su número elevado de casos se sitúa en sexto lugar (18,59), precedida por Aragón (19,23).
El hecho inmigratorio ha propiciado un patrón epidemiológico ya conocido desde hace años en la Europa
Occidental, con porcentajes muy elevados de casos que corresponden a pacientes nacidos en otros países. El Dr. Rafael Vidal, neumólogo experto en tuberculosis y miembro de SEPAR, explica que “en zonas españolas con elevada inmigración se aprecian porcentajes comprendidos entre el 30 y el 50% de enfermos inmigrantes y en Barcelona, por ejemplo, en barrios ligados a altos niveles de pobreza, como El Raval, el Besós o Ciutat Vella, la incidencia de tuberculosis supera los 80 enfermos por 100.000 habitantes”.
A pesar de la alta prevalencia de la tuberculosis entre los inmigrantes procedentes de países en desarrollo, el Dr. Vidal insiste en que “el perfil de los pacientes con tuberculosis es muy diverso ya que la TB afecta desde a los sanitarios como enfermedad profesional u otros universitarios, como cooperantes, hasta personas con bajo
nivel socio económico, y puede afectar a cualquier persona ya que esta enfermedad se transmite por vía
aérea”. No obstante, existen diversos colectivos que presentan una mayor incidencia: pacientes inmunodeprimidos (infectados por VIH, neoplásicos, tratados con inmunosupresores), indigentes, toxicómanos, presos, inmigrantes procedentes de países en vías de desarrollo, cooperantes, etc.
A este respecto, es importante que el médico, tanto de atención primaria como hospitalaria, piense en esta
enfermedad cuando realiza el diagnóstico diferencial ante cualquier paciente que presente tos y expectoración de más de dos semanas sin otra causa que lo justifique. No hay que descartar este diagnóstico por la procedencia o la condición social del enfermo, aunque debido al fenómeno migratorio, España coincide cada vez más con el patrón observado en algunos países europeos, donde más del 50% de los casos se dan en personas nacidas en otros países.
La tuberculosis es una enfermedad infectocontagiosa. Se transmite por vía aérea, al igual que el resfriado común. Sólo transmiten la infección las personas que padecen tuberculosis pulmonar. Al toser, estornudar, hablar o escupir, expulsan al aire los gérmenes de la enfermedad, conocidos como bacilos tuberculosos. Basta inhalar una pequeña cantidad de bacilos para contraer la infección.
Una persona con tuberculosis activa no tratada infecta una media de 10 a 15 personas al año. Sin embargo, no todos los sujetos infectados por el bacilo de la tuberculosis necesariamente desarrollan la enfermedad. El sistema inmunológico “empareda” los gérmenes que, aislados por una gruesa envoltura cérea pueden permanecer en estado latente durante años. El riesgo de enfermar aumenta cuando el sistema inmunológico de la persona está debilitado.
La tuberculosis en Europa
Según un informe emitido por el European Centre for Disease Prevention and Control (ECDC) de la Unión
Europea, con datos referentes a 2006, España registra 18,3 casos de tuberculosis cada 100.000 habitantes. Con esta tasa, España se sitúa en noveno lugar tras Rumania (126,4), Lituania (75,2), Letonia (57,9), Bulgaria (41,9), Estonia (33,8), Portugal (32,4), Polonia (22,5) y Hungría (18,8).
En números absolutos de casos registrados, España se sitúa en cuarto lugar con 8.029 enfermos, tras Rumania (27.319), Polonia (8.593) y Reino Unido (8.498). Según el ECDC, seis países europeos, entre los que se encuentra España, suman más de dos terceras partes de los enfermos de tuberculosis en esta región. Francia, Alemania, Polonia, Reino Unido, Rumania y España reportan más de 5.000 casos cada país.
2010 Año del Pulmón
Cientos de millones de personas sufren cada día de enfermedades respiratorias crónicas. Según las últimas
estimaciones de la OMS (2007), actualmente 300 millones de personas sufren de asma, 210 millones de personas tienen enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), mientras que incontables millones han rinitis alérgica y otras son diagnosticados tempranamente enfermedades respiratorias crónicas. La tuberculosis (TB), una enfermedad milenaria que se transmite por el aire, lejos de detenerse avanza a un ritmo trepidante. En todo el mundo son ya alrededor de 1,8 millones de personas que mueren anualmente por la enfermedad, la TB mata 5.000 personas cada día –siendo la infección que provoca más muertes sólo por detrás del VIH. Según datos de la OMS la tuberculosis afecta a 9,2 millones de personas; además, se calcula que un tercio de la población mundial tiene tuberculosis en estado latente: está infectada por el Mycobacterium tuberculosis – patógeno que causa la tuberculosis, y podría desarrollar la enfermedad si el sistema inmunológico se deprime. Las enfermedades pulmonares son muy comunes en todas las poblaciones y grupos de edad en todo el mundo que representan el 19% del total de defunciones y el 15% de los años de vida ajustados por discapacidad. A pesar de esta evidencia, la conciencia pública y política de las vías respiratorias y las enfermedades pulmonares es muy limitada. Por lo tanto, el ERS (European Respiratory Society) junto con otras sociedades científicas dedicadas a las vías respiratorias en el plano internacional reunidas en el Foro Internacional de Sociedades Respiratorias (FIRS) ha declarado 2010 Año Internacional del Pulmón en un
esfuerzo por aumentar la conciencia de la importancia de la salud pulmonar.